Las situaciones continuadas de tensión, desequilibrio de carga de trabajo, desliz de autonomía o encono interpersonal que se desarrollan con motivo o consecuencia de la actividad laboral se reconocen como un factor desencadenante de estrés laboral y pueden ser el precedente de conductas de acoso o mobbing. Teniendo en https://andrewi047xbf5.rimmablog.com/profile